Los jueces del Cuarto Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenaron esta tarde a 35 años de prisión, siendo la pena máxima que se aplica en el país, a Frankelis Holguín Medina por incendiar un vagón del Metro de Santo Domingo, donde 20 personas resultaron heridas.
También lo condenó al pago de 27 millones de pesos a favor de las víctimas y de 241 mil euros a favor de la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (OPRET)
El tribunal, presidido por Pilar Rufino Díaz, e integrado además por Daira Medina y Gisel Naranjo, halló culpable a Holguín Medina de violar varios artículos de la Ley 267 sobre terrorismo, así como los artículos 294 y 295 sobre tentativa de homicidio.
El tribunal tomó la decisión tras acoger el dictamen presentado por los fiscales adjuntos Laura Vargas y Julio Saba, por considerar que presentaron pruebas suficientes que rompieron con el principio de inocencia del imputado.
El tribunal entiende que el imputado usó un artefacto para incendiar el vagón del metro donde 20 personas resultaron lesionadas.
Los jueces condenaron a Holguín Medina a pagar la Opret 241 mil 160.61 euros o el equivalente en pesos dominicanos a la Opret.
En cuanto a la constitución de la autoría civil presentada por En cuanto a Franklin González, quien resultó con quemaduras en el 90% de su cuerpo, el tribunal condenó al imputado a pagarle 15 millones de pesos.
Mientras que a Marilyn De León, también lesionada, el tribunal condenó al imputado a pagarle una indemnización de cinco millones de pesos.
En cuanto a Mario Emilo Zalas y a Carlos Alejandro Radhamés, el tribunal condenó a Holguín medina al pago de dos millones de pesos de indemnización a cada uno. A Leoncio Emiliano de la Cruz; Carolina Perdomo; María Altagracia Díaz a un millón de pesos cada uno como justa reparación por los daños ocasionados con el hecho.
Asimismo fijó para el próximo 31 de marzo a la 9:00 de la mañana la lectura íntegra de la sentencia.
Reacción
A la salida del tribunal el imputado rehusó referirse a la sentencia y bajando del estrado en medio de estrictas medidas de seguridad, no mostró ninguna reacción.
Los principales afectados, González y De León, dijeron que aunque la sentencia no les devuelve su salud, la misma sienta un precedente en la sociedad dominicana para que hechos como estos no vuelvan a ocurrir