En ese momento, el quinteto en la provincia de Khon Kaen (más o menos a 450 kilómetros al noreste de Bangkok) se encontraba en fila y llevaba puestas camisas con la frase "No queremos un golpe militar", dijo Phavinee.
Un vocero del gobierno tailandés no respondió a las llamadas de CNN en busca de comentarios al respecto.
Pero, según Phavinee, los estudiantes de la Universidad Khon Kaen fueron trasladados a una instalación del ejército tailandés, Camp Sri Patcharin, donde se reusaron a firmar un acuerdo para no participar en actividades políticas. Fueron puestos en libertad después de más o menos ocho horas, indicó el abogado, pero les han pedido que regresen por el cargo de haber quebrantado la ley marcial que ha estado en vigor en Tailandia desde que Prayuth (quien en ese entonces era el jefe del ejército) anunciara en mayo que el país había sido puesto bajo el control militar.
Desde entonces, la junta militar impuso una serie de medidas que presuntamente tenían el objetivo de restaurar el orden y resolver la crisis. Entre dichas medidas hubo suspensiones de los medios, toques de queda y prohibiciones sobre las reuniones públicas.
Sin embargo, la oposición no ha desaparecido.
Hollywood ha jugado un papel en parte de este movimiento, gracias en cierta medida al líder de las protestas, Sombat Boonngamanog. En Twitter y otros sitios, Sombat a menudo ha utilizado referencias a la cultura popular para difundir sus mensajes.
Una de estas referencias que parece haber resonado proviene de las películas basadas en la serie escrita por Suzanne Collins. Katniss, una adolescente que compite en un espectáculo de asesinatos a sangre fría, conocido como Juegos del hambre, muestra el gesto en el que se alzan tres dedos, el cual se convierte en un símbolo de revolución en contra de un gobierno tirano.