El sub campeón olímpico Gabriel Mercedes este miércoles, cuando desarrollaba el primer combate en busca de cubrirse de gloria con su segunda medalla olímpica en su justo retiro.
Una y otra vez repetía que lo único que había pedido a Dios era que le diera salud. “Esto no puede ser, yo lo único que le pedía a Dios era que me diera salud para esta pelea”, insistía Mercedes, quien tocado por el dolor y el llanto, no pudo ni siquiera hablar para la prensa que aguardaba en la zona mixta del Excel–South Arena 1.
“Dios mío, Dios mío, no, no, esto no puede ser, Dios mío”, gritaba incesantemente un Gabriel Mercedes que llegó a Londres con la ilusión de alcanzar una medalla para la República Dominicana. Era uno de los grandes favoritos para alcanzar una presea en la categoría de los 58 kilogramos, no solo por su vasta experiencia, sino su reputación de ser uno de los mejores del mundo.
El doctor Milton Pinedo, jefe médico de la delegación y quien se encontraba en el lugar confirmó la lesión de los ligamentos cruzados, detrás de su rodilla derecha. “Parece que es bastante seria porque compromete su actuación en el deporte”, dijo Pinedo, poco antes de que Mercedes fuera trasladado en ambulancia a la policlínica de la Villa Olímpica.
Con su rostro muy compungido, Felipe Payano, Ministro de Deportes y gran amigo de Mercedes, señaló que lo sucedido al atleta “es una verdadera tragedia”. Sin embargo, dijo que si ello “ha sido la voluntad de Dios, hay que aceptarlo”.
El presidente del Comité Olímpico Dominicano lamentó la lesión que sacó a Mercedes de combate y de la competencia para acceder a una medalla, que sería la tercera que lograría el país en estos juegos.
“Estamos profundamente dolido”, dijo Mejía, quien estaba acompañado de don Felipe Vicini, presidente de CRESO, así como por Felipe Payano, Ministro de Deportes, Antonio Acosta, Tony Mesa, Milton Pinedo, Francisco Camacho, Héctor Lizardo Jorge, entre otros.
El presidente de la Federación Dominicana de Taekwondo, dijo que “debemos resignarnos a lo sucedido, nadie esperaba que pasara esto”.
Expresó que estos son momentos que hay que ser consecuente con Gaby.
Su entrenador, Miguel Camacho, también estaba destrozado por la situación.
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